Se trata de un embutido muy antiguo cuyos orígenes datan de la época del Renacimiento. Se elabora con carne de cerdo blanco muy seleccionada y además se le añade trufa negra de la región de Savigno.
Se elabora con la carne de la masa lumbar de cerdo ibérico de bellota y se le añade el adobo tradicional cuya base es el pimentón, elaboración 100% natural. De sabor suave y textura veteada.